El ascenso está un poco más lejos para la UD Ourense. Esa es la conclusión después del primer partido de play off ante el Arosa, después de tener el partido controlado, con una ventaja de dos goles y con un rival casi entregado, pero en el que los cambios de ambos entrenadores y el aspecto físico marcaron el resultado final que obliga al conjunto ourensanista a ganar en A Lombra el próximo domingo para seguir luchando por ese ascenso en otro play off.
Porque el partido comenzó raro, con menos gente de lo habitual y con menos ruido ambiental de lo esperado y acabó con decepción y con la sensación de dejar escapar una opción de sentenciar la eliminatoria. El que tuvo miedo de inicio fue el Arosa y más concretamente su técnico, Luisito, con un planteamiento defensivo para buscar el 0-0, quizás recordando el último partido en O Couto donde cayó goleado y en el bando ourensanista se apostó por cambiar la apuesta de Varo en el lateral izquierdo, que había sido clave en el aquel encuentro por Samu en esa banda, una mayor temporización del juego para dominar el partido a través de la posesión, pero sin la verticalidad y profundidad habituales lo que supuso un primer contratiempo como fue la desaparición de uno de los valuartes en ataque como Luismi.
Pero las dudas en el juego de la UD Ourense no impidieron que Yelco Alfaya fuese otro día más su estilete en ataque y que fuese un equipo letal en todos los duelos en cualquier parte del campo que se diesen. Fue más una sensación de dominio que una realidad palpable en un primer tiempo jugado a ritmo lento, con escasas ocasiones y en el que Yelco Alfaya se sacó de la manga una jugada por banda para provocar una falta antes del descanso que propició que Lucas Puime en el segundo palo, pusiese el 1-0 como previo al intermedio.
De casi sentenciar a hundirse
El gol parecía suponer un punto de inflexión en el partido y más cuando en el inicio del segundo tiempo, otro error defensivo del equipo de Luisito permitió a Ares en área pequeña colocar el 2-0 con cuarenta minutos de juego por delante y una sensación de que lo visto en el partido de liga podría repetirse o al menos de que el partido y la eliminatoria la tenía controlada la UD Ourense.
Pero en los partidos hay muchos factores que cambian el resultado y el desarrollo de los mismos y en este llegó el momento de los cambios. Luisito introdujo velocidad arriba, más contundencia en medio campo y comenzaron a ganar duelos y tener más llegada al área de Alex Cobo, mientras Borja Fernández comenzó a mover piezas que funcionaban y el equipo comenzó a resquebrajarse en el medio campo, a ser muy vulnerable en defensa y totalmente inofensivo en ataque.
Además físicamente el equipo dio un bajó considerable y el Arosa pasó de dominado y casi hundido a dominador, primero sembrar dudas con un error defensivo en un córner consiguiendo el 2-1 en un remate sin oposición en el punto de penalti y dejando la puerta abierta a un empate, que volvería a ser en otra jugada de córner con otro error defensivo en el primer palo donde Santiago remató solo de cabeza. Dos golpes letales que pudieron ser más en un final de partido de total desconcierto y hundimiento de un equipo rojillo totalmente desconocido y a merced del rival.
A pesar de todo, la UD Ourense todavía está a un triunfo de seguir luchando por el ascenso.
Los banquillos
“Fuimos superiores y luego nos vinimos atrás por miedo”
El entrenador de la UD Ourense, Borja Fernández, hacía dos tipos de valoración: “Si pienso en el 2-2 final no me voy muy contento para casa, pero si hago un análisis global veo que el equipo hizo lo que tenía que hacer y que fue muy superior”. Y hablaba del paso atrás que dio el equipo en el último tramo de partido: “Igual nos vimos con ese 2-0 y renunciamos un poco a jugar, ese fue nuestro fallo. Me voy contento con el trabajo que han hecho los chicos, pero hay que mejorar cosas porque fueron 75 minutos muy buenos y no fue por físico el que nos viniésemos atrás, fue por miedo y querer amarrar un resultado y siempre pido que no hagamos eso”.
“El equipo tuvo personalidad para empatar el partido”
Daba mucho valor al empate el técnico visitante, Luisito: “Un partido muy difícil, como preveía. Estuvimos muy bien, pero cometimos dos errores garrafales en defensa. Llevamos un golpe grande, pero con los cambios el equipo mejoró mucho, tuvo personalidad y empatar una eliminatoria que teníamos francamente complicada”. “El empate creo que hizo justicia y tenemos que tratar de ganar el domingo con el apoyo de nuestra afición”.
