Con el Almansa ganando en Pumarín mientras se consumía el último minuto, los aficionados del Oviedo se temían lo peor. Pero un pseudo milagro con triunfo en la prórroga incluido evitó lo que iba a ser un drama casi definitivo. La tónica en un equipo asturiano que ha hecho de un arte eso de vivir con el agua al cuello. Temporada no apta para cardiacos en tierras ovetenses. Fueron los primeros en revolucionar su plantilla a base de cambios. Modificaciones que afectaron también al banquillo. Todo para salir y entrar de los puestos de descenso. Ahora, están fuera. Pero una derrota en el Pazo les dejaría tocados otra vez. Nueva prueba de fuego para las siete vidas del Oviedo.
El rival mañana del COB tendrá a Guillermo Arenas con la pizarra en mano, el hombre que hace cuatro meses dirigía los designios cobistas y hace 10 celebrara el ascenso desde la LEB Plata. Nombre propio con todas las letras para un encuentro que, a buen seguro, le remueve cosas por dentro.
En su plantel, la experiencia asoma la cabeza para dar el callo en los momentos difíciles. De eso sabe un Óliver Arteaga que, sin los fuegos artificiales de antaño, sigue teniendo calidad y galones para ser la referencia interior.
Clevon Brown, a su lado, llega tras hacer su mejor partido del curso, mientras que Martí y Domenech saben hacer su función cuando les toca.
Variedad
Al otro lado de la zona, en el puesto de base, un poco de todo. Peñarroya dirige y deja que Crouch ejerza de como escolta que asume sin pedir permiso ni perdón. También importante el carácter e implicación de un enérgico Chuso González y la calma de Thorjarnarson. Santana, por su parte, está teniendo menor participación.
Sobre la marcha llegó otro con muchas batallas vividas, Durand Scott, equilibrado en sus dos primeros duelos. Mientras, Pruitt se esmera en el rebote con el físico como carta de presentación.
Es el cuadro de jugadores que lucha por llegar la meta de la permanencia a pesar de que su camino ha tenido muchas curvas. Efrente estará el COB, que lleva unos metros de ventaja en esa carrera de fondo. Uno de esos duelos para no dejarse nada en el depósito porque el premio obliga a no hacerlo. La tranquilidad (con muchas comillas) está del lado ourensano, mientras que la presión viajará en autobús desde Oviedo. Todo para dejar un encuentro que promete ser de alta tensión.
Partido dedicado a las personas con diversidad funcional
El duelo de mañana en el Pazo será especial. Y no solamente por la trascendencia deportiva que tiene a efectos clasificatorios. El encuentro que medirá al COB y al Oviedo Baloncesto tendrá como protagonistas a todas las entidades de Ourense de personas con diversidad funcional. De esta forma, los cobistas contarán con el respaldo en la grada de cientos de personas pertenecientes a ADO, Aspanas, Aixiña, Down Ourense, Por eles o TEA, entre otras asociaciones, que disfrutarán de una tarde de deporte y convivencia.
Esta actividad se pone en marcha a través del Área Social del club, que sigue con la labor de acercar al baloncesto a diversas asociaciones de la ciudad y de la provincia, así como clubes deportivos de otras disciplinas, habituales ya en el Paco Paz durante estos meses. Un proyecto que sigue dando pasos hacia delante y que, además de estrechar vínculos, permite que las gradas del Pazo presenten un ambiente inmejorable en cada jornada.
Homenaje a Moncho y entradas a precio reducido para socios
El COB y los aficionados rendirán mañana un merecido homenaje a Moncho, figura incuestionable del club que, durante tres décadas, se ha ganado el cariño de todos los que están y los que pasaron a lo largo de los años. Además, para que la grada sea el jugador número “6” una vez más esta campaña, los socios cobistas tienen la opción de sacar entradas (máximo dos) para amigos o familiares a un precio reducido de cinco euros.
